Cuando C. llegó al hotel, ya era bastante tarde. Cenó un sandwich en la cafetería y el camarero que ya le conocía, le preguntó si ya tenía compañía. C, le dijo que no, que sabía que iba a llegar tarde. El camarero, amablemente, le sugirió un acompañante. Un chico jovencito, que él conocía, y que no le importaba la hora. Se lo pensó un rato, y le dijo que sí, que valía. El camarero, sacó su móvil, marcó un número y habló unas palabras, y mirando al cliente, le comentó que su amigo estaba cerca, y que si quería que se presentara en la cafetería o en su habitación directamente.
C. estaba a gusto en la cafetería y le contestó que le esperaba en la barra.
Pocos minutos después entró un joven en el hotel, se dirigió a la cafetería y el camarero se lo presentó a C.
Este es Bryan, le dijo. Se sentaron en una mesa, pidió una coca-cola y empezaron a charlar. Un rato después subieron a la habitación.
Una vez en la habitación, C, le dice que se arrodille y se la chupe
Bryan le obedece y está dispuesto a tragarse toda su polla
El chico está disfrutando
Comentarios
Publicar un comentario