Dedicado a jackchatterley.wordpress.com
Llevaba 5 años impartiendo en la Facultad de Arquitectura. Mis alumnos tenían de 19 a 25 años. Me gusta dar clase y me gusta ver a los chicos venir. Me fijo en los bíceps que les sobresalen por las mangas cortas de la camiseta, o como se les marca la musculatura. A veces pienso que me gustaría verles sin ropa. Cuando llega el verano que están en la pradera con el torso al descubierto, disfruto viéndolos. Yo tengo 40 años, pero me gustan los jóvenes. Siempre voy con unos vaqueros y una camiseta. Pero como tengo una polla bastante grande, se me marca a veces el paquete.
A mí me gusta y me da igual. También hay chicos que se les nota bastante.
Pero todo es normal. No voy follando con ellos constantemente.
Pero esa tarde hubo un cambio. Yo tenía tutoria y uno de mis alumnos más apetitosos me había pedido cita para que le explicará algo que no entendía.A las cuatro y media en punto, llegó José Carlos. Era un chico estudioso, veinticuatro años, moreno, delgado, se nota a que hacía deporte. Muchas veces, cuando se levantaba me había fijado en su paquete. Y sabía que él miraba mucho el mío. Pero no estaba allí por eso. Nos sentamos y empecé a explicarle lo que no entendía. Cómo seguía sin verlo, me levanté para explicárselo en la pizarra. No sé si por la cercanía del muchacho, yo estaba un poco empalmado. El caso es que le vi como no dejaba de mirarme el bulto. Se lo expliqué, y al preguntarle, no se había enterado de nada. Así que me acerqué a la puerta, eché el cerrojo y le dije, que debería hacer un descanso y que podríamos hacer algo para relajarnos.
No sé por qué lo dije, pues estaba en mi trabajo, pero lo dije. Me toqué el paquete con la mano, cuyo tamaño era imposible de esconder y el echó mano al suyo también.
Se quitó la camiseta y se lanzó sobre mi boca. Le correspondí.Y le desabroche el pantalón y le bajé la cremallera.
Él no podía más. Su polla salió disparada totalmente erecta. Me abrió la camisa y fue recorriendo mi cuerpo con la lengua mientras yo le masturbaba, me bajó el pantalón y el slip a la vez y se encontró con mi polla en su cara. No perdió el tiempo y se la metió entera en la boca, casi se ahoga.
No había mucho tiempo e hicimos un 69. No tardó mucho en correrse. Y todavía con el semen por la cara, le di unos kleenex y nos limpiamos bien.
Le dije que no podía enterarse nadie de esto, que me podían echar y el me contestó que para su carrera tampoco debía saberse. Se vistió, bueno nos vestimos y se fue, porque tenía otro alumno citado a las cinco y media.
Sacó un nueve en el examen.
Nunca me había pasado eso en clase. Y nunca volvió a pasar. Fue un alumno excepcional.
Comentarios
Publicar un comentario