Este verano con todo el rollo que había habido con el virus ese, mi padrino me invitó a ir de vacaciones con él a su apartamento. Me llevaba muy bien con él.
Hacía calor de estar cerrado y me senté cómodo en el sofá, en slip y con una camiseta. Apareció mi padrino por detrás, sin camiseta y me cogió cariñosamente por detrás, poniéndome la camiseta subida sujeta por la cabeza.
Estaba a gusto así, me decía al oído, lo que le había gustado que me fuera con él. Estuvo muy cariñoso conmigo, me quitó la camiseta y empezó a acariciarme, a mi siempre me han gustado las cosquillas, y cuando me quise dar cuando, estaba acariciándome el paquete, le miré pero no tenía ninguna expresión, así que no dije nada.
Siguió besándome por el cuello, hasta que noté que me cogía la polla. No me pareció bien, pero era tan cariñoso y lo hacía sin inmutarse, tan natural, que no dije nada.
Así que me bajé el slip para estar más cómodo y estaba empalmado, mi padrino, me acariciaba tan delicadamente que me hacía sentirme en la gloria.
Paró un momento, para preguntarme si me estaba gustando.
Si, le dije, eres tan delicado, y además eres mi padrino.
¿Quieres que siga haciéndote cosas?
Le dije que sí, sin saber lo que iba a hacer
Y entonces, me puso a 4 patas y empezó a acariciarme el ano con la lengua. La sensación era inmensa
Ninguna chica me lo había hecho.
Yo no sabía que mi padrino fuera gay o bisexual, pero todo me estaba gustando. Lo siguiente fue comerme la polla desde atrás
Sentía un placer inmenso. ¿Sería yo también gay?
Lo siguiente me gustó menos. Se colocó, me puso encima y me penetró. Lo que me dolió aquello.
Nunca le había visto desnudo. Quitando la última parte, el resto me gustó mucho, pero sobre todo su delicadeza. No me importa hacerlo más veces, o sea que ójala que lo hagamos todos los días.
Fotos tomadas del Blog https://nuevaediciondeperros.blogspot.com/search?updated-max=2020-06-07T12:00:00%2B01:00&max-results=2&start=8&by-date=false
Hacía calor de estar cerrado y me senté cómodo en el sofá, en slip y con una camiseta. Apareció mi padrino por detrás, sin camiseta y me cogió cariñosamente por detrás, poniéndome la camiseta subida sujeta por la cabeza.
Estaba a gusto así, me decía al oído, lo que le había gustado que me fuera con él. Estuvo muy cariñoso conmigo, me quitó la camiseta y empezó a acariciarme, a mi siempre me han gustado las cosquillas, y cuando me quise dar cuando, estaba acariciándome el paquete, le miré pero no tenía ninguna expresión, así que no dije nada.
Siguió besándome por el cuello, hasta que noté que me cogía la polla. No me pareció bien, pero era tan cariñoso y lo hacía sin inmutarse, tan natural, que no dije nada.
Así que me bajé el slip para estar más cómodo y estaba empalmado, mi padrino, me acariciaba tan delicadamente que me hacía sentirme en la gloria.
Paró un momento, para preguntarme si me estaba gustando.
Si, le dije, eres tan delicado, y además eres mi padrino.
¿Quieres que siga haciéndote cosas?
Le dije que sí, sin saber lo que iba a hacer
Y entonces, me puso a 4 patas y empezó a acariciarme el ano con la lengua. La sensación era inmensa
Ninguna chica me lo había hecho.
Yo no sabía que mi padrino fuera gay o bisexual, pero todo me estaba gustando. Lo siguiente fue comerme la polla desde atrás
Sentía un placer inmenso. ¿Sería yo también gay?
Lo siguiente me gustó menos. Se colocó, me puso encima y me penetró. Lo que me dolió aquello.
Nunca le había visto desnudo. Quitando la última parte, el resto me gustó mucho, pero sobre todo su delicadeza. No me importa hacerlo más veces, o sea que ójala que lo hagamos todos los días.
Fotos tomadas del Blog https://nuevaediciondeperros.blogspot.com/search?updated-max=2020-06-07T12:00:00%2B01:00&max-results=2&start=8&by-date=false
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